Menú Cerrar

IGP Vinos de Castellón

En 2003 un grupo de agricultores decidió recuperar la vitivinicultura de los siglos XV a XX, para lo que crearon y reglamentaron la Indicación Geográfica ‘Vins de la Terra de Castelló’. Esta figura de calidad designa a los vinos obtenidos íntegramente a partir de uvas producidas dentro de las tres comarcas vitivinícolas Alto Palancia-Alto Mijares, Sant Mateu y Les Useres-Vilafamés según los principios de buenas prácticas agrícolas. Con la adaptación a la normativa europea, la denominación actual es Indicación Geográfica Protegida Castelló (IGP Castelló).

La IGP Castelló garantiza el origen, la calidad y seguridad de nuestros vinos. La certificación garantiza la procedencia del vino, el cumplimiento de los parámetros físico-químicos y la superación de rigurosas catas organolépticas realizadas por expertos. Actualmente la IGP Castelló ampara a 14 bodegas, 120 viticultores y 250 hectáreas de viñedo.

 
La IGP Castelló ampara a los vinos producidos en las tres comarcas vitivinícolas de Castelló: Alto-Palancia Mijares, San Mateu y Useres-Vilafamès. En 2022, la IGP Castelló contaba con 235 hectáreas inscritas, 15 bodegas (todas ellas embotelladoras) y 109 viticultores. Al final de la campaña 2021-2022 se calificaron 5.681 hectolitros de vino con IGP Castelló. Las bodegas adscritas a la IGP Castelló elaboran cerca de 600.000 litros de vino y comercializan más de 500.000 botellas al año. 50 referencias o marcas de vinos elaborados en Castellón recorren nuestra provincia, parte del territorio nacional, llegando incluso a Alemania, Estados Unidos, Inglaterra y China.
Aunque los primeros indicios se remontan a los siglos VII-V a.c., no fue hasta la época romana cuando se empezó a cultivar la vid en la provincia de Castellón. Durante los siglos XVI al XX vinos como el Murviedro en la zona de Palancia-Mijares y el Carlon en el Maestrat experimentaron una larga trayectoria de esplendor productivo y un potente comercio internacional. A principios del siglo XX dos acontecimientos prácticamente acabaron con la produccion: la filoxera y la Ley del Estatuto de la Viña, el Vino y los Alcoholes de 1971, que prohibió la plantación y venta de estas cepas y el consumo de vinos producidos por las variedades híbridas. Hasa el año 2.000 no se produjo una recuperación de la vitivinicultura como opción agrícola de desarrollo de la región.
El clima mediterráneo con influencias continentales regala noches frescas en verano, otorgando carácter y estructura a los vinos, sin perder ese toque frutal y fresco. El entorno natural y el terroir, así como las variedades de uva cultivadas, confieren características diferenciales. Todos nuestros viñedos son de explotación directa para controlar la calidad de las materias primas empleadas. La vendimia se realiza siempre a mano, en cajas pequeñas y con maceraciones en frío.
El proyecto vitivinícola de la IGP Castelló no busca un nuevo cultivo, sino que ahonda en las raíces para extraer de la tierra los sueños de nuestros antepasados. El paisaje de nuestro territorio combina alcornocales, olivos y monte bajo mediterráneo para ofrecer un proyecto coral, que donde los agricultores impulsan una 'agricultura Mediterránea 360º'.
Las viñas están abiertas a los visitantes y amigos que quieran conocer nuestro proceso de elaboración. Muchas de nuestras bodegas ofrecen propuestas de enoturismo que incluyen visitas guiadas a bodegas y viñas, incluyendo la zona de los olivos centenarios, catas comentadas de vinos y aceite de oliva virgen extra y maridajes con productos autóctonos de proximidad.